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El miedo por el velocista debe ser sólo un compañero de los que no molestan. Una presencia discreta que permanece lejos de la mente de otra manera sólo terminaría obstaculizando una trabajo, el del velocista, que por definición es aquel que se lanza de cabeza a la lucha. Los sprints son emoción, riesgo más o menos calculado, instinto y adrenalina. No cosas de todo el mundo. También se necesita un poco de locura para competir en espacios reducidos a 70 km/h.
Sin embargo, hay un piloto que parece estar bloqueado de forma importante por el miedo a los sprints. Una fuerte contradicción para alguien que ha construido su carrera en el sprint. Estamos hablando de Marcel Kittel, un alemán que este año está demostrando estos límites en los primeros sprints del Tour de Francia.
Si analizamos mejor la situación, debemos hacer algunas observaciones. Hasta el año pasado el doble de Ivan Drago (oponente histórico de Rocky Balboa) tenía a su lado granaderos del calibre de Maximilian Richeze y Fabio Sabatini listos para allanar el camino y traerlo lanzado a 200 metros de su llegada. Esto le permitió empezar desde delante del grupo y liberar todo su poder, que es mucho.
En las primeras etapas de este Tour 2018 le vimos partir desde atrás y nadie le acompañó a la cabeza del grupo. También ha surgido la mala suerte. De hecho, su gregario, el austriaco Marco Haller, está convaleciente por haber sido atropellado por un coche hace unos meses. El otro grave error es el de su equipo, Alpecin Katusha, que no ha construido alrededor de su campeón un grupo capaz de apoyarlo en el mejor de los casos. Kittel no es como Sagan o Robby Mckwen (el oponente australiano de Cipollini) que puede salirse por su cuenta. Al final de la cuarta etapa el equipo trató de apoyarlo, obteniendo 2 resultados negativos: malo en el sprint y pérdida de un minuto en la clasificación para Illunur Zakarin por un pinchazo. Pocas ideas pero confusas.
Hay todavia quien miedo no lo tiene, es Marc Cavendish quien siempre se lanza de cabeza en cada sprint. Pero en este caso el problema es con las piernas.