Comienza desde Valdengo (Biella) ya ciudad donde empezo el Giro en 2014. Los primeros 150 kilómetros son totalmente planos con los obstáculos usuales del camino (rotatorias, divisor del tráfico, etc) en casi todos los centros de ciudad.
Es la etapa de posibles trampas y posibles emboscadas gracias al recorrido que se presta de una manera particular, en la parte final, con los ascensos de Miragolo San Salvatore (inédito) y Selvino (último GPM en 1995 a Tony Rominger). Después de Selvino sigue una descendida entremezclada con las curvas de la horquilla y 9 kilómetros de acercamiento a Bergamo Alta y entonces a la línea de final. Últimos kilómetros a través de Bérgamo Alta subiendo a Porta Garibaldi y luego (con 200 m en empedrado) a Largo Aperto.
Los entusiastas del ciclismo recuerdan estos caminos que en los últimos años han sido metas en el Giro di Lombardia. El año pasado, el italiano Diego Rosa, en los clásicos de las hojas muertas, perdió una gran oportunidad haciendose anticipar de Chávez, demostrando que esta es una llegada para gran corredores con experiencia. Con la creatividad mostrada a lo largo de los años podríamos decir que es una meta apta para un grande como Vincenzo Nibali.
Descubra la hermosa escalada en Bérgamo Alta.